sábado, 26 de septiembre de 2009

Gas lacrimógeno peruano en Honduras. Vea el video

Las fuerzas policiales y militares que reprimen a los manifestantes antigolpistas utilizan bombas lacrimógenas de la Policía Nacional del Perú, suministro del que es responsable el gobierno y que pone en situación vergonzosa al Perú, al violar el embargo impuesto por la Organización de Estados Americanos (OEA) y contradecir flagrantemente la proclamada condena de la administración de Alan García a la ruptura del orden democrático en la nación centroamericana.

Un video filmado por el Gremio de Cineastas de Honduras y difundido mediante la red Youtube de Internet, bajo la denominación “Barrios y Colonias de Tegucigalpa se rebelan contra toque de queda en Honduras” http://www.youtube.com/watch?v=YartPc2UBjI, muestra la brutalidad con la que están siendo atacadas las zonas populares de la capital de ese país, con bombas lacrimógenas, vomitivas e irritantes, sin consideración alguna por la presencia de niños, ancianos o mujeres. En un momento de la filmación, aparece en pantalla las manos de un poblador mostrando una bomba ya explotada, y se escuchan sus palabras: “Este es el tipo de bomba que usa la policía para reprimirnos. Lo mandan los Estados Unidos a la policía del Perú, y la policía del Perú la manda a Honduras. ¿Cómo es eso?, ¿qué explicación pueden darle a esto?”.

La bomba arrojada por los represores hondureños lleva un cintillo que acredita que es propiedad de la Policía Nacional del Perú. El blog “The Field” de Estados Unidos comenta sobre el punto: “También podemos ver en ese video que las bombas de gas lacrimógenas disparadas por la Policía Nacional ayer, fueron selladas como propiedad del gobierno del Perú, lo que sugiere fuertemente que el presidente peruano Alan García participa en el contrabando de armas al régimen de golpe de Estado de Honduras. Algo que ahora tendrá que responder ante la Organización de Estados Americanos, en general, y su vecino Brasil, en particular”.

El hecho es muy grave, tanto por realizarse de espaldas al Perú, que no está enterado de estas relaciones clandestinas entre un gobierno que se jacta cotidianamente de democrático y los golpistas condenados por el mundo. Se agrava la situación además porque un país de la importancia de Brasil ha tomado un protagonismo decisivo en la actual fase de la crisis hondureña, impulsando decididamente al retorno del presidente Zelaya, y el Perú aparece en el campo opuesto facilitando las armas para salvar a Micheletti.

lunes, 14 de septiembre de 2009

Saqueos del Siglo XXI


El 3 por ciento de las aguas dulces del planeta serán el principal motivo de conflicto geopolítico del siglo XXI. En Argentina, buques extranjeros roban agua para venderla a otros países.

Los argentinos tenemos, realmente, una memoria del saqueo y de la resignación frente a la explotación de los recursos naturales y la consecuente contaminación que dejan en nuestro territorio muchas empresas.

En este caso, la ONG ecologista Río Paraná denunció que la empresa Makhena S.A, con sede en Miami y sucursal en Buenos Aires, está vendiendo por internet agua del río Paraná a Medio oriente y África, favorecida por la falta de una estructura jurídica nacional o provincial que regule el tráfico de agua dulce en el país.

¿Cómo lo hace? El mecanismo es el siguiente: Los buques para poder navegar deben cargar una determinado volumen de agua en sus bodegas, a esto se le llama el lastre, de esta forma los barcos descargan las mercaderías en el puerto y cargan agua dulce, que es la que comercian. Las cantidades varían entre 60.000 y 70.000 toneladas por envío.

Lo peor de todo es que lo hacen con total impunidad, y muchas veces ante la mirada de Prefectura Naval Argentina que no tiene los instrumentos jurídicos para actuar. El problema es que, si bien es un recurso natural renovable, el problema va creciendo en la medida que crece la demanda de agua a precios irrisorios: con costo cero se llevan ganancias altísimas.

Así como la organización ambientalista denunciante, se sumó al reclamo de una reglamentación que regule el tráfico y comercialización de agua dulce del senador Ricardo Kaufmann (PJ – San Javier), quien también hizo eco de la denuncia en medios de Santa Fé, y Corrientes.

domingo, 13 de septiembre de 2009

Creer o reventar

Esta es la película Loose Change. Con un presupuesto de apenas 6.000 dólares, Dylan Avery intenta demostrar, con material extraído de archivos oficiales y publicaciones en la web, que los atentados del 11-S se llevaron a cabo con la venia del gobierno de George W. Bush.